En su informe anual sobre la fiscalización de sustancias psicotrópicas, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), afirmó que los tratados vigentes que regulan las sustancias psicoactivas no exigen la “guerra contra las drogas”. La Junta afirmó que “el mundo no está obligado a elegir entre una aplicación “militarizada” de la legislación sobre drogas y la legalización del uso de drogas para fines no médicos (recreativos)”. La opción ante estos dos extremos –castigo versus legalización– sería una política equilibrada que haga de la salud y el bienestar su piedra angular.