“Me di cuenta de que tenían las manos llenas de callos, con vejigas infectadas por las quemaduras y las cortadas por la forma de consumir el crack. Se me ocurrió crear un kit con elementos desechables, esterilizados y seguros”. Al referirse a la propuesta del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, Alberto dice que estos centros son útiles en un proceso de rehabilitación social, pero hace énfasis en que por sí solos no resuelven el problema del consumo. “Hay que acompañar al adicto y no abandonarlo arrojándolo a la calle, a la droga”. Explica que las “narcosalas” deben integrar todas las formas de consumo.