?Plantean exportar harina de coca para tratar adictos
El experto Holandés Martin Jelsma dijo que el estimulante suavede esta hoja puede ayudar a bajar los niveles de uso de sustancias fuertes
Viernes, 16 de agosto de 2013
El proyecto de Bolivia de exportar derivados de la coca tiene un potencial mercado en la venta de harina de esta hoja para el tratamiento médico de adictos a la cocaína, afirmó el experto holandés en políticas internacionales sobre drogas, Martín Jelsma. La propuesta fue hecha en el marco del IV Foro Internacional de la Hoja de Coca, organizado por el Gobierno del presidente boliviano, Evo Morales, con la participación de especialistas de nueve países.
Jelsma, director del Programa Drogas y Democracia del Transnational Institute (TNI) de Amsterdam, dijo que "está claramente demostrada la gran diferencia entre coca en su forma natural" y los diferentes grados de concentración de la cocaína, que es uno de sus alcaloides.
Sin embargo, según el experto, "un estimulante suave como la coca" puede ayudar a bajar los niveles de uso de sustancias fuertes, cuyo consumo se hace en un mercado ilegal.
"Hay que buscar posibilidades de influir en el mercado. Ha sido muy difícil reducir el mercado internacional de estimulantes fuertes ilegales", pero se puede hacer "un intento de reconquista de ese mercado con estimulantes suaves, controlados, pero lícitos", dijo.
La harina de coca, a su juicio, puede ser el producto idóneo para tratar a "usuarios problemáticos de cocaína" ya que ese derivado puede exportarse con más facilidad que las hojas de la planta misma.
Según Jelsma, en este momento no hay sustancias para sustituir a la cocaína para quienes quieren dejar la adicción, pero ya se están haciendo pequeños experimentos con plantas de coca en Brasil y Colombia, mientras que en Holanda se piensa en hacer lo mismo.
EXPORTACIÓN Por otro lado, el exzar antidrogas de Perú Ricardo Soberón afirmó que Bolivia tiene posibilidades de exportar hojas de coca y sus derivados lícitos al mercado de su país, de Ecuador y Argentina, en el marco de convenios bilaterales.
Dijo que la exportación no será una tarea fácil por la normativa internacional pero destacó que hay condiciones políticas, judiciales y sociales para lograrlo.
El experto, que presidió el Consejo Directivo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas de Perú, cree que la exportación de la hoja de coca y sus derivados es un nuevo abordaje en la lucha contra las drogas.
“Una hoja de coca que se ingiere es una hoja menos para el narcotráfico", dijo Soberón, en alusión a los proyectos de uso de la planta con fines medicinales y alimenticios.
Destacó que entre las condiciones favorables para hacer realidad la exportación de coca está "un proceso de reforma de las políticas de drogas en el mundo" donde América Latina es protagonista y además hay "un cansancio generalizado por la guerra contra las drogas y se requieren nuevas visiones" para abordar la temática.
Agregó que Bolivia dio un paso "al poner en tela de juicio" la Convención Única de la ONU sobre estupefacientes de 1961 al lograr a principios de este año que se reconozca el derecho de su población al masticado o "acullico" de la hoja, una práctica indígena.